Objetivos
En el primer bloque de reflexiones descubriremos la figura de Dios, un Padre que nos llama por nuestro nombre, que nos ha creado, que cuida de nosotros con cariño y que nos ha hecho hijos suyos. Presentaremos algunas características de Dios como su santidad, fidelidad y eternidad. Dios está en todas partes y todo lo sabe, nada es imposible para Él. Dios es más de lo que puedas imaginar.
Reflexión
¿Recordáis quién era Jesús? […] A lo mejor después de las vacaciones ya os habéis olvidado del mejor amigo, del que nunca falla. El curso pasado aprendimos muchas cosas sobre él. Una de ellas es que Jesús es el hijo de… ¿De quién? […] Sí, de Dios. Podemos leer en Mateo 3,17: “Y una voz que salía de los cielos decía: ‘Este es mi Hijo amado, en quien me complazco’” . Dios dice que Jesús es su Hijo amado. Entonces, Jesús tiene un padre, que es Dios. Jesús quiere mucho a su Padre Dios y muchas veces habla de él y habla con él. Por ejemplo en Juan 10,41-42 dice:“Entonces Jesús levantó los ojos a lo alto y dijo: ‘Padre, te doy gracias por haberme escuchado. Ya sabía yo que tú siempre me escuchas’”.
Os preguntaréis: y Dios ¿también es nuestro Padre? Sí. En las cartas de los apóstoles leemos: “Gracia a vosotros y paz de parte de Dios, nuestro Padre y del Señor Jesucristo” (Gálatas 1,3).“ Un solo Dios y Padre de todos, que está sobre todos, actúa por todos y está en todos” (Efesios 4,6). Es genial. Tenemos como Padre a un Dios, el único Dios verdadero.
Vamos a descubrir todo lo que hacen nuestros padres y madres por nosotros. ¿Recordáis cuando todavía no sabíais hablar? […] ¿Qué hacían vuestros padres /madres por vosotros?
Nos daban de comer, nos limpiaban, nos vestían, nos llevaban al médico cuando estábamos enfermos, … nos cuidaban mucho.
→También nuestro Padre Dios nos cuida: “confiadle (a Dios) todas vuestras preocupaciones, pues él (Dios) cuida de vosotros.” (1 Pe 5,7)
– Si llorábamos, nos consolaban; si reíamos, se reían con nosotros.
→ También nuestro Padre Dios nos consuela: “Como aquel a quien su madre consuela, así yo (Dios) os consolaré” (Is 66,13)
Luego fuimos creciendo y nuestros padres, que nos quieren y desean que aprendamos, nos llevaron al colegio. Después vienen los amigos, los juegos, la televisión… y entonces los papás nos dicen: “¿No deberías estar estudiando en lugar de ver la televisión?” o “ese chico con el que vas es un poco gamberrote”. ¿Y por qué lo hacen?[…]
Se preocupan por nosotros, tratan de indicarnos el mejor camino, qué amigos nos convienen, qué estudios, qué deporte, qué programas de televisión,…
→ También nuestro Padre Dios nos guía: “Este es Dios, nuestro Dios por los siglos, nuestro guía para siempre”(Sl 139)
¿Habéis hecho alguna vez una trastada en casa? […] ¿Y qué ha pasado?[…]
Los padres también nos corrigen (a veces con algún castigo) para que aprendamos, pero nos perdonan.
→ También nuestro Padre Dios nos corrige y perdona siempre (Lc 15,8-10)
Muchas cosas podríamos hablar sobre los padres, pero todo se resume en que nuestros padres nos quieren, y ¿Dios Padre? […] “el Padre mismo os quiere” (Jn 16, 26).
Juan, ¿cómo se llama tu padre?[…] ¿y cómo lo llamas tú?[…] Sara, ¿cómo se llama tu padre / madre?[…] ¿y cómo la llamas tú?[…] Probablemente llamamos a nuestro padre “papá” y a nuestra madre “mamá”, y a ellos les gusta mucho. También a Dios le gusta que le llamemos “Padre”. Jesús, su Hijo, así lo llamaba. A nuestro Padre Dios le gusta que le contemos lo que pensamos, sentimos, hacemos, lo que nos preocupa, lo que nos pone alegres o tristes, todo. Cada noche al acostarnos podemos decir: GRACIAS PADRE DIOS.
María Rosa Orcal